El 2022 está a la vuelta de la esquina y el equipo de Marca Lima decidió abrir la pregunta a sus seguidores de TikTok sobre los deseos e intenciones que tienen para su ciudad el año entrante.
Cuando se trata de nuestra capital, la carga de deseos se vuelve más compleja, ya que somos la ciudad en el departamento más poblado del país, además de tener la mayor cantidad de migrantes nacionales y extranjeros.
Solo en los 43 distritos que conforman Lima Metropolitana viven más personas que en todo Hong Kong, Suiza y Honduras. Tranquilamente podría ser un país dentro de otro país.
Esto ocasiona que Lima sea muy diversa. Pero no todo ha sido bueno. La causa de que tengamos una capital superpoblada es el centralismo y este es un problema que venimos arrastrando desde tiempos en que éramos la capital del Virreinato.
La situación fue aún más intensa en la década de los 50 y 60, cuando Lima aumentó su privilegio al acentuar su poder político y económico.
Todo ello deriva en que la capital del Perú sea muy diversa, con matices de todo el Perú en una sola ciudad. ¿Sabías que en Lima también hay comunidades originarias? Sí, Lima alberga a dos pueblos indígenas u originarios: Jaqaru y Quechuas. Asimismo, en el departamento se hablan tres lenguas originarias: Jaqaru, Kawki y Quechua.
La gran migración a la capital también causó preguntas sobre cómo nos identificamos. Muchos de nosotros habremos nacido en Lima, pero tal vez nuestros padres son de otra provincia, o nuestros abuelos. Entonces, ¿qué somos?
Identificarnos y reconocernos es complejo, pero también es parte de la autoexploración y reivindicación de la diversidad cultural. Es así que en el Censo Nacional del 2017, por primera vez se incluyó una pregunta de este tipo.
El resultado fue que en la capital, más de 1 millón de personas se identifican como parte de la población indígena u originaria.
Y se preguntarán ¿qué tiene que ver esto con los deseos para el 2022? Pues que en cada contexto se pondrán prioridades distintas. Simplemente son diversas las intenciones, tanto como cada uno de nosotros.
Además, no olvidemos que el próximo año, sí, este 2022, nos tocará elegir un nuevo alcalde o nueva alcaldesa que gobierne nuestra ciudad por los próximos cuatro años. Así que tal vez podríamos apartar un deseo para que esta persona haga de esta ciudad un lugar mejor para todxs.
Sin embargo, si tienes otros deseos, no te preocupes, aún tenemos un tiempito para pensar en la política, cuando los candidatos inicien sus campañas.
Otros deseos e intenciones, definitivamente, al igual que en 2020, estarán enfocados en la salud, en especial con la pandemia aún latente y enfrentar una posible tercera ola, además de que ahora la variante ómicron nos rodea.
Desear que se incremente el porcentaje de personas vacunadas con sus dosis completas, que se tome más conciencia de mantener ventilados los espacios y preferir reunirse en lugares abiertos a los cerrados. Asimismo, que no se desborde el número de camas hospitalarias o de unidad de cuidados intensivos y pedir por el equipo que trabaja en medicina COVID-19 en los centros de salud.
La seguridad ciudadana también es el plato obligado dentro del menú diario que nos sirven las noticias, nuevas modalidades, secuestros al paso, raqueteros, etc. Evidentemente, no basta con desear que nuestras autoridades se ocupen más del tema, tendríamos que ir a la raíz en la educación (aún no presencial), falta de empleos y oportunidades para la juventud y salud mental no abordada de manera profesional.
9 deseos para Lima el 2022
1. Las intenciones de este año están enfocadas en que la ciudadanía tome conciencia de que la pandemia no ha terminado. Que pensemos en todos aquellos que han perecido y nos vacunemos. Hasta el momento, es la única herramienta eficaz que tenemos de enfrentar de la mejor manera al coronavirus. Así, al menos esperamos que una eventual tercera ola no nos afecte con demasía.
2. Con toda la crisis económica mundial ocasionada por la pandemia y la especulación, muchas veces el sueldo no es suficiente para cubrir nuestras necesidades. Ante ello, cada vez más gente joven se sumerge en el inestable mercado laboral. Desde Marca Lima, deseamos que todos aquellos que apoyan a sus familias o tratan de salir adelante consigan un trabajo en el que se respeten sus derechos y haya un buen clima laboral.
3. También esperamos que en 2022 las autoridades en general tomen conciencia de que todas y cada una de sus decisiones tienen repercusiones en el costo de vida, que afecta directamente a la ciudadanía. En sus manos está el que podamos cubrir nuestras necesidades básicas como alimentación, vivienda, educación, salud, entre otros.
4. Todas las obras planeadas para Lima que ya tienen un presupuesto asignado deberían de concluirse en el tiempo estipulado. De lo contrario, sería una falta de compromiso con los ciudadanos. Que la corrupción en grandes obras sea delito del pasado y se empiece a construir un presente y futuro favorable más transparente. Además, algo que casi siempre pasa desapercibido, también tengamos lugares para recreación. Los seres humanos también necesitamos un tiempo para despejarnos, no todo es trabajo, estudios y preocupaciones.
5. De acuerdo a una encuesta de Lima cómo vamos, el 34,3% de los limeños considera que la limpieza pública y la acumulación de basura es el segundo problema que afecta su calidad de vida, solo superado por la inseguridad ciudadana (72,8%). Pero hacer el cambio también está en nuestras manos. Que reducir, reciclar y reusar sean la regla y no algo que solo hacen unas pocas personas. Leyes como la de la prohibición de tecnopor en nuestro país desde el 20 de diciembre son pasos importantes que debemos de aplaudir y pedir que se repliquen en 2022.
6. ¿Cansado de que las malas noticias inunden redes sociales, medios de comunicación, en general, tu vida? Nosotros también. ¿Es que acaso la vida es tan insostenible como parece? Sí, pasan malas noticias como tragedias por accidentes, delitos, entre otros, pero también hay buenas noticias. Por ello, este año desde Marca Lima pedimos por un 2022 en el que se resalten las buenas noticias, esas que nos devuelven la fe en la humanidad, que nos sacan una sonrisa. Porque también hay días de sol y arcoiris, no todo es frío y cielo nublado en la capital.
7. Te has puesto a pensar que si para los adultos a veces Lima puede ser abrumadora, ¿cómo lo es para la infancia y niñez y sus padres o cuidadores? Bueno, es momento de ponernos a la altura de ellos y escucharles. Las ciudades deben de estar construidas y organizadas de tal manera que sea segura, limpia e interesante también para esta población. Por ejemplo, Urban95 tiene algunas propuestas como hacer que las veredas por donde transitamos hasta llegar a nuestro destino sean más amigables, sean coloridas y tengan espacios para descanso con sombras. ¡Por un 2022 más amigable con la niñez y sus cuidadores!
8. Cuando cruzas la pista, debes estar atento y mirar a ambos lados por lo menos tres veces antes de cruzar, porque no en todas las calles hay semáforos. Y a veces incluso hay baches en las pistas. Ahora, imagina cómo es hacer esto todos los días para una persona con discapacidad. Si a uno le resulta agotador, para estas personas es el doble o triple. Desde Marca Lima esperamos que el año que se aproxima sea uno en el que se tome en cuenta las necesidades de cada uno de nosotros, que sin importar la discapacidad que tengamos, podamos transportarnos independientemente. Y no solo ello, que en los lugares públicos se considere emplear el lenguaje de señas, braille y se den los elementos necesarios para poder desenvolvernos.
9. La inclusión viene desde todas las aristas. No podemos considerarnos inclusivos si nos burlamos de alguien que habla un idioma originario, si nos “reservamos el derecho de admisión” de una persona por su color de piel, si atacamos a una persona por su orientación sexual o expresión de género. Deseamos una ciudad en la que nadie sea discriminado por haber migrado de cualquier otra región del país a Lima, en la que nadie sea mirado sobre el hombro porque no cuenta con los mismos ingresos que otros, en la que nadie sea agredido por su orientación sexual, en la que nadie sea minusvalorado por sus costumbres ni por la religión que profesa.
Necesitamos que en 2022 seamos una ciudad más tolerante, tal vez no lleguemos en un año al nivel de Uruguay o Argentina, pero podemos ir paso a paso, como el Estado plurinacional de Bolivia, que este año promulgó la Ley de identidad de género, que permite a las personas trans acceder a su derecho de identidad. Paso a paso se llega a la meta. Por una Lima que en 2022 se anime a dar ese paso.
Luego de todo este recuento de deseos e intenciones, se preguntarán ¿por qué solo 9 y no 10? … porque el décimo se lo dejamos a nuestros lectores y lectoras, para seguir entendiendo juntos lo diferentes y aún esperanzados que somos quienes vivimos y trabajamos por una mejor Lima en todos los aspectos.